El hosting es uno de los puntos clave en el proceso de creación de una web, puesto que se trata de seleccionar donde alojarla. Hay una gran variedad de opciones de factores a considerar y de precios (incluso los hay gratuitos), por lo que la decisión puede ser difícil.
Es importante que no te precipites ni selecciones la primera opción que veas, puesto que si no eliges bien puede darte muchos problemas, obligándote a cambiar de hosting o incluso llevando tu proyecto al fracaso.
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¿Por qué es importante elegir un buen hosting?
Elegir un buen hosting es una decisión de gran importancia puesto que si te decides por uno que cumpla ciertos requisitos, puedes tener muchos problemas:
- Si tienes más tráfico del que el hosting puede soportar, se puede caer el servidor.
- Problemas de seguridad.
- Puede tardar en cargar, lo que afectará negativamente al SEO.
- En general, mala experiencia de los usuarios por todos los motivos anteriores.
¿Qué tipos de hosting existen?
Hay muchos tipos de hosting diferentes, los más importantes son:
- Hosting compartido: es el más común. Consiste en un servidor que aloja diferentes páginas web que comparten los recursos de velocidad, espacio, etc. Es una opción económica y suele ser suficiente en webs o tiendas online que empiezan o que tienen poco tráfico, aunque existe el riesgo de que una de las webs consuma muchos recursos y sature hosting.
- Hosting gratuito: algunas empresas ofrecen un hosting gratuito, aunque ofrecen muy pocos recursos y funcionalidades. En seguridad tampoco suelen ser demasiado fiables, así que solo son recomendables si tienes una web con pocas visitas como entretenimiento, pero no para webs profesionales.
- Hosting compartido para CMS: es un hosting que ofrece un alojamiento específico para gestores de contenido y plataformas de eCommerce. Es una buena opción si utilizas plataformas como WordPress o Prestashop.
- Servidor VPS (Servidor Virtual Privado): esta opción consiste en un servidor que aloja diferentes webs y tiendas online, pero por separado, por lo que cada una tiene su espacio privado. Obtendrás mejores recursos que con un hosting compartido. Una buena opción si tienes una web o tienda online con mucho tráfico.
- Servidor dedicado: si contratamos un servidor dedicado sí que tendremos un servidor exclusivamente para nosotros, con lo que podremos obtener una gran cantidad de recursos. Esta opción es ideal si tenemos una tienda online con miles de productos y mucho tráfico, pero también es una opción más costosa.
- Cloud Hosting: como su nombre indica, esta opción ofrece un hosting en la nube que crece a medida que nuestras necesidades de recursos aumentan. Es una opción muy interesante porqué tu web o ecommerce estará alojada en diferentes servidores, por lo que aumenta la seguridad ya que si un servidor cae el resto seguirán funcionando. El consumo depende totalmente de la necesidad de recursos de tu sitio, y el coste subirá o bajará en función de tu consumo de recursos, por lo que si en un momento puntual tienes más tráfico no tendrás problemas.
Como ves, hay diferentes tipos de hosting, cada uno tiene sus características y un coste diferente. Debes analizar tus necesidades y elegir en consecuencia.
Recuerda que hay otros factores importantes. Una buena atención al cliente, tener un buen servicio técnico por si hay cualquier problema o que ofrezcan una certificación SSL son otros puntos muy importantes a la hora de elegir un hosting para una tienda online.
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